
Geles para aparatología: cómo elegir el correcto
En el mundo del cuidado profesional, hasta los geles para aparatología que se aplican puede marcar la diferencia entre un tratamiento eficaz o una experiencia decepcionante.
No todos los geles para aparatología son iguales; elegir el incorrecto puede afectar la transmisión de la energía, el confort del cliente o incluso dañar el equipo. Aquí te contamos por qué y cómo elegir bien.
Por qué importa elegir el gel correcto
- Transmisión de energía efectiva
Para que aparatos como cavitación, ultrasonido o radiofrecuencia funcionen bien, el gel debe facilitar la óptima conducción de ondas, evitando la presencia de aire entre el aplicador y la piel. Un buen gel acuoso soluciona este problema. - Composición adecuada: hidrogeles vs. sustancias oleosas
Un gel apto debe ser hidrosoluble, no graso, incoloro, no corrosivo y sin residuos, como explica el manual de uso médico estándar. Aceites o lociones oleosas pueden dañar los cabezales o interferir con el equipo. - Formato óptimo: viscosidad, pH y estabilidad
Los hidrogeles deben presentar la viscosidad adecuada para mantenerse sobre la piel sin escurrirse, además de mantener su consistencia durante el tratamiento. El pH ideal ronda entre 5.5 y 7, compatible con la piel para evitar irritaciones - Ingredientes seguros y beneficios adicionales
Los mejores geles incluyen ingredientes como aloe vera o glicerina para aportar hidratación, propiedades calmantes y mayor confort. También pueden ser antibacteriales o beneficiosos para la piel. - Protección y resultados superiores
Un buen gel protege la piel de exceso de calor o fricción, mejora la transmisión de energía y permite que el tratamiento sea más efectivo y cómodo.
Riesgos de usar geles inadecuados
Tipo de gel inadecuado | Problemas comunes |
Aceites o productos oleosos | Dañan aparatos, ofrecen mala conducción |
Geles muy líquidos o que se secan | Pierden contacto y eficacia |
Geles con pH desequilibrado o irritantes | Provocan reacciones cutáneas |
Geles sin conductividad adecuada | Disminuyen resultados del tratamiento |
El gel no es solo un medio de contacto: es un componente clave que potencia la eficacia, seguridad y experiencia del tratamiento. Usar un hidrogel de calidad, con buena conductividad, pH equilibrado y componentes amigables con la piel, es una inversión que mejora resultados y protege tu equipo.
